Premio Nobel de Facto de la Medicina Ilegal
ayudemedrtranca@ubbi.com
Como profesional de la medicina no puedo dejar de dar mi opinión acerca del tema .masculinidad en el crimen. (habrá quien se atreva a cuestionar esta necesidad, pero que me lo diga en la cara), por lo que he elaborado este .Top Ten. en orden ascendente (en virilidad), para que aquellos que decidan emprender una carrera delictiva sepan a qué atenerse:
Puesto 10: Envenenamiento
Evidentemente, el envenenamiento no es muy muy muy de hombres, básicamente porque se relaciona con el arte culinario. Es cierto que a veces se puede envenenar a alguien poniéndole algo en la ginebra, o el whisky, lo que ya sería más masculino, pero hay que andar manipulando un gotero, lo que ya no te deja muy bien parado. Por último, morir víctima de envenenamiento tampoco es muy muy muy de hombre; Un hombre que se precie de tal debe ser tan recio de estómago como de puÑos, por lo que concluyamos que este delito es propio de maricarmencitas.
Puesto 9: Carterismo
Ya el nombre es un poco equívoco, porque está relacionado de algún modo con una .cartera.. El hecho es que este noble deporte requiere grandes dosis de motricidad fina . como el bordado o la plomería -, más la arriesgada posibilidad de entablar contacto físico con otro hombre, así que a llorar a la iglesia pero descartado.
Puesto 8: Secuestro
Acá depende. Considero que un hombre de bien, que los tenga bien puestos, no tiene que andar aprovechándose de la superioridad numérica ni impedir la movilidad de otra persona, así que el secuestro sólo sería de hombres si lo practicamos en igualdad de condiciones y dejándole la puerta abierta al recluso. Lo que pasa es que dicen que en ese caso ya no sería .secuestro. sinmo .tener un invitado. . cosa que me parece tampoco es muy admisible, porque de alguna manera es como ponerse un disfraz de mucamita francesa y andar diciendo .uy, uy, uy, necesitás algo?., dando saltitos con un plumerito fucsia fluorescente; así que descartémoslo también, por favor. Una sola excepción: Yo. Es cierto que alguna vez me vi en la obligación de tomar rehenes . en aquella desgraciada entrega de los Premios Nobel a la Medicina Ilegal -, pero en mi caso se justifica porque me hicieron calentar.
Puesto 7: Asesinato Serial
Acá también digamos que depende si se hace de frente . que es de hombre; por ejemplo, con un revólver . o de espaldas . que no es de hombre, por ejemplo, con una puÑalada en la espalda. También hay que tener en cuenta que si uno está de espaldas, por ejemplo, tipo decapitación al estilo samurai como Bruce Willis en la película aquella. es todavía más de hombre porque es más difícil, aunque igual no recomiendo en general ponerse de espaldas por razones que no vienen al caso. Igual el tema de que sea .serial. ya te da una cosa medio de organización, anotación y manipulación de agendas electrónicas, que ya es más bien propio de una secretaria ejecutiva. No sé.
Puesto 6: Escándalo Nocturno
Acá empezamos a ver la luz en el camino. El hecho de andar de noche practicando karate contra las paradas de los colectivos o cantando canciones sobre determinadas características físicas indica que por lo menos no somos nenes de mamá que se van a dormir después de ver al Topo Gigio. Lo único que hay que tener cuidado que el motivo sea ese y no, por ejemplo, ser travestis callejeros; o peor, estudiantes de murga.
Puesto 5: Faltas a la Higiene
Sería el único caso en el que admito que un hombre pueda ser propietario de un restaurante . siempre que tenga tubos fluorescentes y jamones colgados en el techo; nada de velitas, por favor, ni de mozas mujeres . sin imputarlo de maricastaÑuelismo explícito. Digamos que ya por el hecho de no limpiar, yo, ponele yo juez, le perdonaría la pena (aunque el tipo, si es de fiar, tendría que reaccionar diciendo que no le tenga lástima y que le dé el doble de lo que pensaba, que se la banca), porque con su accionar estimula y ejercita el sistema inmunológico de los jóvenes de hoy en día que francamente les agarra lepra con sólo mirar un especial del Discovery (sobre lepra).
Puesto 4: Robo de Autos
Se perdona en este caso la motricidad fina necesaria para abrir una cerradura, en función de que el tipo está robando nada menos que un auto, una poderosa máquina que desafía los límites del dominio humano, no un jarroncito antiguo. Y aparte no para arreglarlo, cosa que ya sería medio babosa, sino para desguazarlo, supongo que a puÑetazos.
Puesto 3: Cartonerismo
El maricastaÑuela de Podeti me quiere hacer creer que esto no es un delito, pero tiene menos calle que Bruselas (también me viene con que Bruselas tiene calles; No saben lo cargoso que es escribir con un tipo soplándote la nuca, espiándote el monitor de su computadora y diciendo .Dale, Tranca, terminá que necesito la compu para laburar, puede ser?.). Esos tipos se están afanando las pertenencias de la gente antes de que se convierta en basura (o sea, cuando la suben al camión). Punto final. De cualquier manera va mi voto de admiración para cualquiera que además de manipular cosas tóxicas con las manos, se convierta en la tracción a sangre de su propio carromato y le pelee el carril al resto de los automovilistas. Sólo por eso dejo irse apenas con una advertencia a los que intentan afanarse mi basura, cosa que logro evitar día a día, aunque me fuerce a quedarme vigilándoa de domingo a viernes de siete a once de la noche.
Puesto 2: Cuatrerismo
Por supuesto, qué mejor motivo para dedicarse al robo que el contacto directo y viril con futuros bifes de chorizo. Un trabajo al aire libre, que me recuerda a mis días en una campaÑa del desierto imaginaria, un trabajo sucio, polvoriento, cansador, con olor a transpiración picada gruesa y bosta. No se me cae un lagrimón porque yo no lloro . aunque ahora se esté poniendo de moda entre los llamados .deportistas. . pero sí me da un poco de acidez, de la emoción.
Puesto 1: Boqueterismo
Y llegamos al Gran Premio de la Masculinidad Ilegal. El boqueterismo aúna las virtudes de la iniciativa privada a un interés sin tacha como puede ser conseguir plata para gastarla en juergas y codssas de hombres, a una .virilidad simbólica. y por fin, al noble y varonil oficio de la MINERíA. Si le pagan a una serie de desgraciados por hacer túneles para instalar máquinas del demonio como subterráneos (yo a uno de esos no me subo NI A PALOS), no entiendo por qué a esta gente, que ha hecho un gran esfuerzo físico y de producción, no sólo no se les paga sino que se la persigue. Deberían dejarlos ir, no te digo que con toda la guita, en todo caso hacerle un descuento, qué se yo, el cincuenta o el cuarenta, pero que se vayan con algo como pago por su trabajo. Porque laburar, laburan, y laburan en serio.
En fin. Tranca y Podeti me insiste que ponga que .las opiniones vertidas por Tranca no reflejan las del webloguero oficial ni la del diario ni son apología del delito ni nada que se le parezca, por favor..
No hay comentarios.:
Publicar un comentario