martes, 3 de mayo de 2011

¡Listo, ya te cacé la onda, Facebook!


Bueno, ya entendí Facebook. No hace gran cosa. No es como blog, o como fotolog, o como programa de radio o como licuadora. A decir verdad, lo único interesante que se puede hacer es “agregar amigos”, lo que no es poco teniendo en cuenta que yo de la amistad hago un verdadero culto –aunque aún estoy evaluando mi disponibilidad para ir a 507 cumpleaños, prestarle 50 mangos a 507 tipos y cubrir 507 mentiras. Es entretenido; no es muy diferente a juntar figuritas, sólo que en vez de figuritas juntás seres humanos (o algo similar): Como un supervillano extraterrestre, de esos que juntan personas para su museo personal y las encierran bajo enormes campanas de cristal.



Pregunta: Cuando juntás a todos los seres humanos del mundo, ¿el tipo ese Zuckerberg te regala una plastibol? Pará. Pará, otra duda, otra duda. ¿Qué diferencia hay entre “croqueta”, “buñuelo”y “bocadito”? Justificar.



Miren, un par de dibujos de “Pinocchio” del gran Winshluss, mi nuevo héroe.


Post original

No hay comentarios.:

Publicar un comentario