Escribe Iosune Olarticoechea
Ingeniera en degeneradismo recreativo
mepongoelpongo@ubbi.com
Comparado con las 374 zonas erógenas que tenemos las mujeres, las dos zonas erógenas de nuestros chicos (que, no os engaÑéis, en realidad es una sola, pero con dos nombres diferentes) pueden parecer un material de trabajo un tanto escaso. ¡Afortunadamente, los especialistas en sexo (sexólogos, psicólogos, prostitutas, directores de cine porno, taxistas) descubren aÑo a aÑos nuevas zonas para que hagáis flipar a tu chico!
Según el último Congreso de Placer y éxtasis Oh Oh Sí Sí Más Más recientemente realizado en las Islas Baleares (en todas), las zonas erógenas masculinas confirmadas científicamente (con una máquina) son las siguientes:
INTERIOR DEL CODO: Pídele a tu chico que extienda el brazo. Se negará, seguramente. Insístele y si es necesario chantajéalo con .esas viejas fotos.. Verás que en la mitad del brazo tiene un .huequito. en forma de rombo, cuyos vértices apuntan a los cuatro puntos cardinales. Tócale alternativamente, con los cuatro dedos, menos el pulgar (cálzate los guantes de lavar, por el tema de los gérmenes y el sexo responsable), los cuatro vértices, tamborileando al ritmo de algún tema del Fary. Después de ciento cuarenta minutos, tu chico flipará hasta alcanzar el éxtasis (ten cuidado porque tu chico la puede diÑar de tanto éxtasis). Cuando dominéis esta técnica, sabrás encender esa llama tan especial a tu antojo, así que aprovechaid para no lavaros los dientes durante meses si queréis!
PARTE DE ARRIBA DE LA CABEZA: Todos sabéis que el órgano sexual más importante es el cerebro; pero como no podéis andar toqueteando el mismo, acaríciale la semi-recta imaginaria que va desde la mitad de la nuca hasta la frente, esta vez con un palo o caÑo (de cualquier modo, toma ese palo o caÑo con guantes de lavar, porque nunca sabéis lo que os podéis agarrar). Estimúlale primero lentamente y ve acelerando, para luego enlentecer lentamente y luego acelerar aceleradamente sucesivamente y alternativamente. Tres veces, durante doscientos veinte minutos Flipará, molará, se pondrá a tope guay y te pedirá más. ¡Es el momento de disfrutar a pleno de vuestra vida sexual! O de pedirle dinero, eso depende de cómo andéis a nivel económico. En este último caso hazlo antes de que llegue al éxtasis total, porque de lo contrario puede considerarse .prostitución.. Flipará.
EXTREMO DE LAS PESTAÑAS: El hombre no es muy afecto a tocarse las pestaÑas por considerarle poco masculino; por lo que desconoce el racimo de nervios conectados directamente al hipotálamo, generadores instantpaneos de endorfinas que se encuentran en lo que el doctor Sturmü (.Los ciento treinta y dos caminos del sexo., Ed. Schnell) llamó .esos pequeÑos pendorchos de placer.. Estimúlale y magréale la punta de las pestaÑas con un trozo de nylon en la punta de un palo (no olvides que es importante que respetéis tu salud y tu cuerpo), en los posible desde otro cuarto (por los gérmenes), durante unas seis horas. Es importante tener paciencia porque durante las primeras horas no se siente nada, y hasta es posible que sienta cierta irritación en los ojos, por lo que deberáis ser bastante persuasiva (ofrécele cien euros, por ej.). Disfrutaid de los gemidos de placer que lanzará, pero evita que llegue al orgasmo, porque puede caer fulminado ahí mismo (además, tendréis que tener cuidado de no meterle palo en el ojo, para lo cual os recomiendoid la instalacióin de un aparato de circuito cerrado en el ordenador). Le haráis flipar, gemir, molar, ponerse a tope guay y gozar como nunca. Es el momento de recuperar el .!fuego. en vuestra relación, o de pedirle que te devuelva los cien euros (ya sabéis lo .olvidadizos. que son los hombres en algunas cuestiones).
PREMOLARES: Nuestra dentadura posee cientois de terminaciones nerviosas. ¿Acaso no habéis clamado por la legalización de la Eutanasia durante esos días de dolor de muelas? Por eso, estimúlale y magréale y masajéale el interior de los premolares, utilizando un traje aislante de amianto y dos capas de plomo (según el Dr. Von Kraftwerk, autor de .Los setecientos treinta y dos mitos heterosexuales., Ed. Westfalia, la boca es una .cavidad pútrida, utilizada como piscina olímpica por un ejército de mortales y cínicas bacterias.). Para mayor seguridad, intenta hacerle el masaje utilizando la telekinesis, durante dos díias y medio aproximadamente (oblígale .mediante amenazas a sus seres queridos, si hace falta, o comprándole un coche nuevo a plazos .a esperar los resultados, ya que al principio puede encontrarlo .frustrante.). Comienza con un movimiento rotatorio (mental) y combpinalos con empujones de adentro ahcia afuera y de afuera hacia adentro, dos veces cada una, respira, empieza de nuevo, espera tres minutos, canta una canción del Miguel Bosé, luego intensificaid la energía mental (de izquierda a derecha) y flipará como si no hubiera Dios. La única contraindicación: ¡Es adictivo!
RESPALDO DE LA SILLA: Aunque tu chico proteste diciendo que esta .ni siquiera es una parte de mi cuerpo, jolín, estoy harto de tus experimentos sin pies ni cabeza, vete a la mierda, chiflada (SIC)., recuerda que en el sexo todo vale, que no existe lo .correcto. ni .lo incorrecto. .aunque es bueno tener mínimos conocimientos de anatomía -y que el único límite es el respeto por tu cuerpo y el del otro (el otro tío). Y si de respeto hablamos, recuerda también que en estos tiempos entablar contacto físico pero físico físico con otro ser humano es peligroso. Muy peligroso. Letal. Están llenos de gérmenes y bacterias y bichos. Yo he visto salir araÑas del pelo de mi último chico, y eso que ya había dejado el ácido. Si quieres suicidaros, tú a lo tuyo, estáis en su derecho, pero os poido que después no os me quejéis conmigo con .tía, me agarré esto y no sabes cómo pica.. En fin, comienza tocando el respaldo de su silla (pídele que no esté, para un mayor sexo seguro) con un trapo embebido en lejía (por los gérmenes) .tú por las dudas envupelvete en cuatro frazadas, dejando un huequito para ver) y realízale movimientois rotatorios en dirección este-oeste, durante lo que duren los San fermines.. Luego, llama a tu chico nuevamente y pídele que se siente nuevamente (procura irte de allí antes de que llegue, por los gérmenes. Comunicaos por medio de post-its rosados, que significan .pasión.). Tu chico flipará, molará, etc., pero tal vez ni te enteres, lo que por otro lado es más seguro y conlleva más respeto por ti misma.
Estas son las primeras cinco de los 27.986 .zonas. detectadas por los expertos. En la próxima entrega veremos las que faltan en más detalle. Mientras tanto, no dudéis en encontrar las zonas antedichas de tu chico, para .hotear. cada vez más tu relación. ¡Jo, tío!
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